Un sinfín de niños ataviados de hebreos y el párroco de la localidad a lomos de la borrica, simbolizan la entrada de Jesús en Jerusalén.
La procesión de las palmas de Alguazas revistió en la mañana de este Domingo de Ramos un gran nivel de participación. Arrancando de la ermita de la Virgen del Carmen del barrio homónimo de la localidad con la bendición de los correspondientes ramos y palmas, el cortejo, encabezado por el más que centenario Tercio Romano o los “Armaos”, tiene año a año como notas distintivas tanto el desfile del sacerdote-párroco del Templo de San Onofre de la población montado a lomos de una borrica –símbolo de la entrada de Jesucristo en Jerusalén- como la presencia de innumerables niños y niñas ataviados de hebreos.
Los componentes de las Bandas de Tambores y Cornetas “Nuestra Señora del Carmen” y “Samaritana” del municipio acompañaron con su música a una ferviente comitiva que, con la presencia añadida del Pregonero 2014 de la Semana Santa local, el Alcalde José Antonio Fernández Lladó y la totalidad de su Equipo de Gobierno al frente del Consistorio Municipal, encaminaría su discurrir hasta la Iglesia Parroquial de San Onofre, donde se oficiaría la solemne eucaristía del Domingo de Ramos.
Siete días de una tradición de masiva religiosidad popular que remonta su existencia al siglo XVI.
El preludio a esta Semana Santa 2014 de Alguazas lo marcó el anuncio de su llegada a través del Pregón que el pasado 5 de abril dio en el citado Templo Parroquial de San Onofre el Alcalde de la Villa y ferviente cofrade José Antonio Fernández Lladó, persona que, dotada de gran espíritu cristiano y miembro de una familia de dilatada tradición nazarena, destaca por su labor constante en el engrandecimiento de los desfiles pasionarios de la población, bien desde su faceta de vecino de pie como pública de primer edil. Un ingente número de propios y foráneos –entre los que se encontraba el Delegado del Gobierno de la Región de Murcia, Joaquín Bascuñana García, y la Diputada del Congreso y oriúnda del municipio María Ascensión Carreño Fernández- asistieron a un Pregón que, amenizado con la actuación de la reseñada Banda local de Cornetas y Tambores “Samaritana”, sería considerado el pistoletazo de salida a un rico repertorio de actos litúrgicos conmemorativos de la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor en el municipio entre los que cabe reseñar la procesión de la Dolorosa que, desarrollada desde hace más de media década en la onomástica de esta advocación y previo Vía Crucis, la imagen que le da nombre desfilaría por las arterias de la Villa arropada por numerosos vecinos y bajo la distinguida escolta de los efectivos de la Policía Local de la población.
Asimismo la Iglesia del Carmen de esta villa alguaceña será el punto de arranque del tradicional Vía Crucis del Miércoles Santo (21:30 horas) cuyo traslado al Templo Parroquial de San Onofre comprenderá un itinerario jalonado por más de una docena de altares montados para la ocasión en las puertas de domicilios de fervorosos vecinos.
El Jueves Santo de Alguazas estará protagonizado por el recogimiento de la procesión del Silencio a cargo de los integrantes de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Sangre.
Y uno de los desfiles pasionarios de más raigambre e historia en Alguazas es el conocido popularmente como “La Carrera” o de “Nuestro Padre Jesús Nazareno” que, discurriendo por las calles del municipio en la mañana del Viernes Santo (8:30 horas), congrega en su periplo a los cofrades de las Hermandades de Nuestro Señor del Pozo y La Samaritana, Santísimo Cristo Amarrado a la Columna, La Verónica, Nuestro Padre Jesús Nazareno, San Juan, Virgen de los Dolores y Soledad y Santísimo Cristo de la Sangre.
Y avanzada la tarde del Viernes Santo otro acontecimiento pasionario en Alguazas es la bajada del Santo Sepulcro o “La Cama” –acompañado de la imagen de la Soledad- desde la ermita de la Purísima a la Iglesia Parroquial de San Onofre para tomar parte en la posterior procesión del Santo Entierro que, caracterizada por el silencio, está conformada por las tallas de la Piedad (portada por los cofrades de la Verónica), la Cruz (llevada a hombros por los hermanos del Santísimo Cristo de la Sangre) y los mencionados Santo Sepulcro (a cargo de los anderos de Nuestro Padre Jesús Nazareno y bajo la escolta de agentes de la Guardia Civil en traje de gala) y Virgen de la Soledad (acompañada por los cofrades de su Hermandad titular de la Dolorosa).
Las procesiones del Domingo de Resurrección en Alguazas confluyen con renovado brío matinal (a partir de las 7:30 horas) en el incomparable entorno de la Plaza de la Iglesia Parroquial de San Onofre de la población en un singular y por ello incomparable “Baile de los Santos” que, a los sones sincronizados de las Bandas de Cornetas y Tambores de la Villa, hacen de este acontecimiento algo único en el contexto de nuestra tierra murciana y de gran proyección no sólo regional sino nacional. Son imágenes movidas con ritmo de alegría y despertar a la vida del Jesús triunfante que anticipan a modo de preludio además en el marco de la neurálgica plaza alguaceña un Domingo de emotivo y solemne encuentro del Hijo Dios Resucitado con su Madre -plasmada en la imagen de la Virgen de la Alegría portada por mujeres- bajo la noble mirada del discípulo amado, San Juan.
En definitiva, una Semana Santa de Alguazas que constituye una de las más preclaras manifestaciones de fe de un pueblo, de un municipio que sabe estar a la altura de un sentimiento de devoción que, además de congregar a miles de vecinos como nazarenos o espectadores, también es foco de atracción multitudinaria de visitantes que acuden a apreciar la singularidad y masivo despliegue de arte que condensan las imágenes y tronos que procesionan las nueve hermandades pasionarias de la población.